Hoy, 23 de abril es Sant Jordi, el día del libro y de la rosa. Un buen momento para reflexionar sobre la importancia de la lectura en el aprendizaje de una lengua extranjera.
Muchas editoriales especializadas en la enseñanza del español como lengua extranjera han dedicado colecciones a libros de lectura graduada (siguiendo los parámetros del Marco Común Europea de Referencia para las lenguas) conscientes de la importancia de la lectura para mejorar y ampliar los conocimientos de la lengua desde el nivel más bajo.
¿Por qué es importante leer en otros idiomas?
Leer en un idioma que estamos aprendiendo nos proporciona estructuras gramaticales correctas y más complejas que las que podemos crear por nosotros mismos, ayudando a fijarlas. También, hay que tener en cuenta que es un buen método para ampliar vocabulario sin olvidar la ortografía.
En nuestras clases, el uso de la lectura es un recurso frecuente: solemos proporcionar a los estudiantes artículos reales de actualidad, temas sociales o de costumbres para leer y comentar.
A lo largo de toda nuestra extensa experiencia como docentes, nos encontramos frecuentemente con estudiantes que deciden empezar a leer en español y nos piden que les recomendemos algún libro. Cuando llega este momento, los animamos proporcionándole títulos que creemos que les pueden interesar. Sin embargo, no hay que ser ambicioso: una primera lectura no debe desanimar al nuevo lector, tiene que gustarle y despertar su curiosidad para seguir avanzando.
¿Solamente los libros pueden ayudarnos en esta tarea?
Hemos comprobado que los estudiantes de entre 25 -35 años no son grandes lectores de libros. Ante la pregunta: ¿Te gusta leer o lees normalmente? La respuesta suele ser afirmativa.
Si la segunda pregunta es, ¿Cuál es el último libro que has leído? la respuesta se complica; los lectores actuales leen a través de internet (y no hablamos de libros en soporte digital). Su lectura se basa en artículos que encuentran en la red, hilos de twitter y otras redes sociales basadas en la comunicación escrita.
En esta situación, los animamos a seguir haciendo lo mismo, pero cambiando el idioma. Todo aquello que les interesa en su lengua materna lo pueden leer en español. Además, si los artículos que leen están relacionados con su profesión, estos les aportarán una importante cantidad de vocabulario especializado/ específico.
¿Qué hacemos cuando a una persona no le gusta leer?
Estas vías de comunicación escrita (redes sociales, periódicos digitales, etc) son una gran herramienta para todas aquellas personas que no leen en su lengua materna. Seamos realistas: una persona que no lee en su lengua materna tampoco lo hará en un idioma extranjero. Esto es así. Por eso, no hay que dejar de lado ninguna oportunidad que invite a un estudiante a empezar a leer.
Siempre animamos a leer: no importa el formato. Aunque sea a través de formatos breves como los periódicos y las revistas, a través de los que nos aportan las nuevas tecnologías o cogiendo un libro (en papel o digital), con la lectura siempre se aprenderá.